Recientemente remasterizado, esta joya del rock independiente galo, vuelve de los lejanos 90 para llenarnos de dicha. Y es que Kat Onoma, es de esos grupos que deberían haber tenido más suerte, y que por venir de Francia, tuvo la mala fortuna de tener delimitado el campo de acción.
La banda, comandada por Rodolphe Burger, tiene a sus espaldas 5 discos que son indispensables. y donde "Billy the kid" ocupa para mi, el primer puesto en cuanto a calidad y proyección. La verdad es que desde que empieza a sonar "The radio" y sobre todo "Le désert", te ves contagiado de esa manera de cantar y tocar la guitarra de Burger, junto al sonido de la trompeta de Guy Bickel ofreciendo un lienzo repleto de sugerencias y suculentas aristas.
El disco, construido a partir de un texto del poeta Jack Spicer, es uno de las trabajos más importantes del rock francés de todos los tiempos. No es de extrañar con perlas como "The gun", o como la desértica "Will you dance?". Un festival de sensaciones lo que produce escuchar la vacilona "Riverrun", o esa colosal "The trap". La verdad es que uno se queda sin palabras.
Uno de los puntos fuertes del disco lo encontramos en "Lady of Guadelupe", con una primera parte en castellano, para luego en inglés llevarnos por sendas de luces parpadeantes. Rozando el blues llegamos a "B. the k." para rematar el viaje con otros dos canciones de esas que se te quedan tiempo en tu retina auditiva, "Night way" y "The poplars", ambas un festín que quieres que no se acabe, redondas melodías, composiciones de esas que ya han pasado a la historia.
"Billy the kid", de principio a fin, un disco que cualquier buen degustador del arte musical bien hecho, debe de tener en su discografía, para melómanos o simplemente para aficionados a lo bueno. Kat Onoma es tu grupo.