Con una mirada puesta en el shoegazing que tanto añoramos de bandas tan inolvidables como Ride, My Bloody Valentine o Curve, y con otra en el britpop, así prepararon los londinenses su segunda embestida en forma de album con este sustancial "Mythologies".
Aquí hay chicha, hay feedback, hay torrentes de emoción, como en "Channel view" y su pop de seda aderezado con una melodía sulfurusa, eléctricos a mas no poder, sumergidos en unas barrica que destila los mejores alcoholes de los 90, cuando grupos Swevedriver nos hacían volar, sin paracaídas, sin miedo a la hecatombe total.
En "In flux", parece que estemos viajando en el tiempo y que nos topemos con una versión ácida de The Psychedelic Furs. Uno de los mejores momentos, más potentes y embriagadores del disco, es ese torrencial sónoro que es "Freak waves", noise pop que hace retumbar las paredes, agitación y juventud arisca en un maremoto de lava y luminiscencia etérea.
Todo el disco esta repleto de guiños, de evocación, de sueños salvíficos, de melodías para retar, ("Sings to Lorelei"), y de hondas evocaciones a los Sonic Youth más planeadores ("Hey, sen"). Alaridos de distorsiones en "Deli Rome", y caos por doquier en la estrambótica y espacial "Colorado", para continuar con la redondez de un disco que te sumerge en las aguas fecundas de la agitación del shoegazing más excelso. Puro vicio.
La casi hora del cd pasa sin apenas darte cuenta, y los aderezos de britpop como "Seven sisters" o "Mysteci" hacen que estemos ante una obra suculenta, altamente disfrutable, necesaria para elevar la voz del volumen, y recuperar toda nuestra afición a esa camada de jovenes aviadores del sonido que tuvieron en el shoegazing su bastión y su lucha.