jueves, 30 de mayo de 2024

KASE O. JAZZ MAGNETISM. "Kase. O Jazz Magnetism" (2011)

 


Lo reconozco. Lo mío no es el hip hop y sus variantes. En los trece años y medio que tiene este blog se cuenta con los dedos de una mano, las críticas a grupos de este estilo. Pero es que este artefacto de  Kase O. de Violaderos de Versos, junto a un grupo de jazz, Jazz Magnetism, es otra cosa. Vamos que escuché un par de temas hace poco y me lo compré de forma inmediata. 

La fusión de jazz y de hip hop es de esas cosas que llama la atención a la primera de cambio, sobre todo a los legos en el estilo. Va mucho más del corset. Sobre todo las dos primeras canciones, "Libertad" y "Como el sol 2011". 

En este disco, nos encontramos canciones ya conocidas de Kase O, juntos con otras nuevas, elevando el nivel de un disco que la verdad es una delicia, hasta para nosotros, post punks varios, shoegazineros atribulados, y demás corsarios de la música independiente. 

"Trabajo manuales A.K.A. Geto Boys" es radiante y brutal y "A solas con un ritmo 2011" es otra de las piezas que te noquea, con su jazz entre rimas, con su palabras entre saxos rutilantes. Mi preferida es "Que no hay alcohol" , un hit en toda regla para tararear, para llevar en tu mochila. 

La parte roquera del asunto se la lleva "Domingos de Cal A.K.A. blue pepper", para en "En 2 minutos 2011" seguir con la especulación jazzística en un torrente sónico que te embauca. El plan más festivo lo hallamos en "Renacimiento" y su jolgorio continuo. 

Así hasta el final con "Javat y Kamel", punto final a un disco de esos que significó un antes y un después en el hip hop, disfrutable para los que no escuchando este tipo de música, sentimos el valor y la calidad de un conjunto de canciones que te emocionan. 



martes, 28 de mayo de 2024

THE AMERICAN ANALOG SET. "For forever" (2023)

 


18 años llevaban The American Analog Set sin sacar un disco cuando editaron este portentoso "For forever". Se dice pronto. 18 años. Y además con la misma formación de "Know by heart" (2001), el que para mi es el mejor disco de su interesante carrera. 

"For forever" es un compendio de todo lo mejor que ya sabíamos de The American Analog  Set.  Post Rock con costuras emocionales ("Camp don't count"), soberbias reflexiones circulares donde se destapa la capacidad creativa de la banda de Andrew Kenny ("Screaming for vengeance"). 

Hasta las dulces veleidades con aroma pop como "Konika & Maliko" tienen un aire de esos que se te queda en la retina auditiva con deseo de perdurar. Aires de kraut en "Over the jeans", es un torbellino de belleza matemática que da paso a "Long limbs" quizás la más experimental de un disco amable, repleto de islas donde regodearse del clima musical creado. 

Mi favorita es "By the bridge", un hit instantáneo,  golosinas para el paladar, prácticas de sueños en construcción. Simplemente rutilante. Como la que titula el álbum, un compendio de galimatías sónicos relajados, un torbellino de disfrute inmediato. 

"The Quiet dark" es otra de las gemas que conforman este cuadro de música para apadrinar suspiros. La música de The American Analog Set siempre tuvo ese aire cautivador que hace que a la primera escucha caigamos rendidos ante ellos, y este disco es otra soberbia muestra de ello. 




domingo, 26 de mayo de 2024

SOULS. "Birds fish or inbetween" (1996)


Irreparable pérdida la que tuvimos hace unos días con la desaparición del amo del noise, Steve Albini. Se fue el mejor productor que ha existido, uno de los espíritus gestantes del noise, un duende libre que en su faceta como productor siempre dejó una huella imborrable. Por donde pasaba él, no crecía la hierba. 

Que se lo digan a este grupo sueco, que si no fuera por su participación y el sonido acerado de las guitarras, sería un disco que pasaría desapercibido, con una cantante bastante floja, que se mueve tras las huellas de Bjork. 

Pero escuchas las dos primeras canciones, "Sonic Sorehead" y "Toxic", y rápido reconoces la pegada, la crudeza de un sonido que te invita al combate, aunque esté cantado una especie de Heidi malhumorada. "Expansive" casi roza el grunge, pero se sobrepone con esa tensión que sólo Albini sabía crear en sus trabajos como productor. 

"T,N.C.Q." esta tocada con la varita mágica de un ruido siempre que se sobrepone al aburrimiento, y "The girl on my couch" es otra de esas deslumbrantes composiciones, armada de fundamento para el disfrute intenso. 

"Fuckmonkey" es otra cornada de sonidos de acero, donde el torrente de la distorsión se te pega a la suela de los oídos y "Cello", single en toda regla cargado de vitaminas por doquier, donde los 90 se notan por cada poro de la canción. 

Y así hasta que llegamos a una parada de descanso con "Shuffle", resumen de lo importante que fue Albini, de como podía cambiar un grupo con el. 


viernes, 24 de mayo de 2024

DRAHLA. "Angeltape" (2024)

 


De lo que va de año, junto al disco de Kim Gordon, este artefacto sónico de Drahla, se llevan el premio de lo mejor acontecido. Y la verdad es que se lo merece con creces la banda de Leeds que ya me llenó la cabeza de dragones con su primer disco ese monumental "Useless coordinates". 

Como unos Dry Cleaning inclinados hacia una espiral de art punk, de no wave, partiendo desde las bases ágiles del post punk, la cosa empieza como para tirar cohetes de tensión con ese apabullante temazo llamado "Under the glass", donde el saxo domina la escena en un vibrante baile de mascaras brutal. 

Luciel Brown sigue ejerciendo de sacerdotisa confabulada a un grupo que se hace fuerte con sus ritmos angulosos ("Default parody"), donde las guitarras suenan a finales de los 70, aspirando a traer del túnel del tiempo a Wire, Mars, y a quien quieran ellos. "Zig zag" bien pudiera ser su manera de hacer un anti hit con ese deje de funk, con ese torrente de energía. 

Y el inicio de "Second rhythm" es pura amenaza, pegada instantánea, doblegando silencios en un apabullante festival de rugidos post punk. Y hasta consiguen construir arquitecturas más complejas como la que nos encontramos en "Talking radiance". Maravillosos. 

A penas media hora larga les basta para tenernos en vilo, y la verdad es que es todo un lujo toparte de bruces con canciones como "Concrete Lily" y con pasadas rallando la conmoción con sus elementos electrónicos que les viene de fábula ("Lip sync"). 

El bajo amenaza con "A" y el final con "Grief in Phantasia" pone el colofón a un disco que se vive intensamente. Hoy los veré en directo. La cosa promete calenturas. 




miércoles, 22 de mayo de 2024

BEASTIE BOYS. "Solid gold hits" (2005)

 


Grupazo Beastie Boys, y discazo recopilatorio necesario para los que disfrutamos con esta pedazo de banda que tantos buenos ratos nos hizo pasar. En este cd se agrupan los sencillos que nos tuvieron en vilo tanto tiempo, y por eso su escucha triunfa desde la primera vez que pulsas el play. 

Si empiezan como un trueno con "So what'cha want" y "Brass monkey", la cosa se pone caliente con ese pelotazo llamado "Ch-check it out", pura dinamita rítmica y gamberra que da paso a uno de los grandes himnos de la banda de todos los tiempos "No sleep 'till Brooklyn". Recuerdo que los conocí cuando sacaron el disco "Licensed to III", su disco de debut del año 1986, y caí rendido de inmediato ante esas guitarras y esos flow endiablados. 

"Hey ladies" es vacilona sin freno alguno y "Pass the mic", de "Check your head", con esa rugosidad eléctrica es un compendio de todo lo mejor de una banda que siempre nos levantó el ánimo. Es imposible quedarte parado cuando los escuchas ("An open letter to NYC"). 

"Root down" es una batidora con un motor que se calienta cada segundo y "Intergalactic" de "Hello nasty" es un torpedo que te deja noqueado. Que placer volver a escuchar "Sure shot", o ese pelotazo para la pista de baile llamado "Body Movin'" con Fatboy Slim. 

Y luego ya con "Sabotage" y su rap de distorsiones rugosas nos hace viajar en el tiempo en una sacudida nerviosa. En resumen, volver a ellos siempre es una delicia, un paseo nostálgico por la mejor banda de hip hop para que el escribe, de la historia.



lunes, 20 de mayo de 2024

SMUDGE. "Manilow" (1994)

 


Da gusto volver con nostalgia a los 90 y todo lo que significó para nosotros. Da gusto resucitar de aquella época grupos como los Smudge, la versión australiana de los primeros Lemonheads (y no es sólo por el sonido). 

Sacaron 3 discos, este es quizás el mejor, y empieza con una sacudida casi grunge, el tema que titula el disco. Pero, es un espejismo, "Ingrown" parece sacada de cualquier disco de Evan Dando. Temas  breves, concisos, pero con pegada, reafirmándose en su capacidad para envolvernos con su deje melódico hermanado con la banda de Boston. 

Hits instantáneos como "Impractical joke" te hacen emocionar a la primera escucha. Y si decía que la relación con Lemonheads va mas allá del sonido, lo digo porque hay dos temas escritos a medias con Evan Dando, "Superhero" y "Down about it", esta última aparece en el disco de Lemonheads, "Come on the feel The Lemonheads". 

"Bodyshirt" sigue por el mismo camino que la mayoría de los temas, una correlación eficaz de estribillos, guitarras saltarinas, melodías pegadizas. "Ugly just like me" y "Hell on hot bread" son otros dos puntos de un gran disco que aun teniendo muchos temas, se pasa en media hora largas. 

Los 90, siempre los 90 para quitarnos las legañas de los recuerdos. Que no pare de sonar todo ese arsenal sónico de esa época maravillosa. 


viernes, 17 de mayo de 2024

SLOW CRUSH. "Huts" (2021)


Para todos los amantes de sonidos cautivadores, de las burbujas cálidas sacrificadas por el escozor de un gemido sensual, para los que seguimos el shoegazing, los belgas Slow Crush ofrecen un recorrido solvente de suavidad a mansalva en este su segundo larga duración, que desde que se inicia con la suave "Drown", te deja pegados a ellos. 

Tienen todo para seguirlos, ataques de sinceridad de guitarras distorsionadas ("Blue"), espacios donde recrear toda la magia de los mejores sonidos marca de la casa de My Bloody Valentine como esa chispeante "Swoon". 

No hay señales de que se agote la magia. El inicio de "Gloom" parece traernos del mundo del ayer a Cocteau Twins, y "Swivel", una de mis favoritas, te deja noqueado con esa delicadeza entre furia enajenada. "Rêve" es un single para los corazones escocidos,  y la que titula el cd, es la plasmación de una energía que pernocta entre espasmos y daños colaterales. 

"LULL", así en mayúsculas, porque se merecen todo tipos de parabienes por su impronta sensitiva, por su carga emocional. En la parte final, "Thrill" y "Bent and broken" te dejan como con ganas de más y más. Enormes Slow Crush. 

 

miércoles, 15 de mayo de 2024

METZ. "Up on gravity hill" (2024)

 


Muchas expectativas tenía tras cinco años en barbecho, de escuchar lo nuevo del grupo de Alex Edkins. Y la verdad es que aunque nos encontramos ante un buen conjunto de canciones, al final te quedas con las ganas de que el grupo tome otros derroteros como los que señalan en la que termina el disco, "Light you way home", donde se enzarzan en un baile de shoegazing que les queda divinamente.

No, para nada estamos ante un mal disco. Es disfrutable de principio a fin, pero es que tenían el listón muy alto con sus anteriores cuatro discos, y la verdad el que escribe esperaba algo más de concreción. Y temas redondos hay para dar y tomar, como el inicio con "No reservtarion/loves comes crashing" y sus péndulos de post punk. 

"Glass eye" con ese inicio brutal de batería es como un tanque indomable y "Entwined (steet light buzz)" la más punk del lote con guiños a Mudhoney.  El inicio de "99" parece de Jesus Lizard y "Superior mirage" quizas sea un pequeño bache en un disco que cuando más lo escuchas, más te das cuenta que falta quizás un grito más de guerra, otros inflexiones en el sonido del grupo. 

"Never still again" recoge en sus notas una buena carga de la historia de Metz hasta la fecha. Lo dicho me quedo con la track que se remoja en shoegazing. Quizás abriendo nuevas puertas, podemos hallar nuevas coordenadas en el sonido de esta interesante banda.


lunes, 13 de mayo de 2024

THE AUTEURS "How i learned to love the bootboys" (1999)

 


Con este monumental disco se despidió Luke Haines, con sus The Auteurs. Y vaya final. El barroco personaje, el músico díscolo seguía en plena forma, produciendo canciones como caramelos envenenados ("The Rubettes"). 

Y lógicamente los que seguimos  toda la trayectoria de este lanzador de flechas a tu corazón, disfrutamos con su epílogo con tonadas tan transcendentes como "1967", o la que titula el disco, un auténtico baile rítmico de guitarras para la discoteca. 

"Your gang, our gang" es casi punk, para que en "Some changes", nos secuestre con uno de esos himnos decadentes que te dejan rendido a la primera escucha. Luego "School" se retuerce en un pop de esos que te deja sin aliento, como "Johnny & The Hurricanes" y su fabrica masiva de psicodelia extraña. 

Puntazo de disco, puntazo de canciones. "Asti spumante" es una detonación controlada de melodías para correrte una juerga en silencio, como "Sick of Hare Krisna" y su meloso y crujiente pop de dormitorio. Grande Haines, este donde esté, haga lo que haga, siempre ofreciendo su maestría para nuestro regocijo.

 

sábado, 11 de mayo de 2024

POP CRIMES. "Gathered together" (2023)


 Lujazo en toda regla el primer disco de esta banda gala, tras un ep que venía a introducir el sabor melódico de un grupo que la verdad te deja un regusto vibrante, con sus melodías artesanales, con su pop de guitarras que duelen ("Ends and begins"). 

Melódicos y urgentes, casi parecen una banda neozelandesa ("No more cryin'), con huecos suficientes en su haber para tararear y pasar un feliz día con himnos del tamaño de "My friends". Cuando meten teclados por medio, les sale "Orange juice", para destapar el polvorín de las esencias. 

"Please come back in the game" es otra joya que hace que tus oídos claudiquen, y "What you loved" parece acercarse a una psicodelia amable. Y luego esta el arsenal de canciones redondas para nota superlativa como la emocional "Do color last?" o "All that time" y su sonajero de guitarras que suenan a un mar que acecha. 

Mi favorita, la que da ocaso al disco, "Nothing has changed", pura armonía para festejar que aun se pueden hacer grandes canciones de pop para ponerte la carne de gallina. Apuntamos a Pop Crimes. Seguro se que hablará mucho de ellos. 


jueves, 9 de mayo de 2024

SHIPPING NEWS. "Very soon, and in pleasant company" (2001)


 Mathrock, post hardcore, slowcore.... La banda de Lousville (con miembros que en algún momento estuvieron en Rodan y The For Carnation), certificó en este que fuera su mejor disco, que lo suyo se defendía por sí solo, como lo muestra ese inicio rompedor llamado "The March song", donde el mathrock es predominante. 

Juegan y se divierten con la calmosa y efectiva "Actual blood", para nubarrones internos, para géiser del alma, vibrando en letanías, esperando que llueva para imaginar melancolías. "Simple halo" y "Nine bodies, nine states" son dos perforaciones marca de la casa, donde las disgresiones instrumentales se elevan a través de un magma sónico que hará las delicias a los que nos gusta este tipo de afrentas musicales. 

Sin embargo, cuando más los disfruto es cuando pedalean pétalos de slowcore otoñal, agazapados en torrentes de silencios que se convierten al rato en pequeñas explosiones de andar por casa para quitar de las paredes las telarañas del ayer ("Quiet victories"). 

"Contents of a landfill", es otra de las gemas que esconde este trabajo tallado con mimo huyendo de especulaciones, y viajando entre claros pasajes de amaneceres envueltos en luces que no se apagan. Para terminar, "How to draw horses", certificando la naturaleza reflexiva y a la vez catártica de una banda que nos regaló muy buenos momentos.


martes, 7 de mayo de 2024

KINSKI. "Airs above your station" (2003)


 En algún lugar entre Mogwai y Sonic Youth. En ese sitio es en el que se movían a sus anchas este grupo de Seattle, siempre de la mano de un aire cercano a una psicodelia con ramalazos divagadores como lo que vemos con el inicio de este cd con "Steve's  Basement". 

Con una discografía sin ningún paso en falso, su pegada refleja a las claras la sintonía de un grupo comandado por Matthew Reid, donde la distorsión se divertía con proclamas de ruido ("Semaphore"), o interludios de esos que te dejan sin palabras, como esa colosal "Rhode island freakout!". 

Mi preferida es "Schedule for using....." con sus casi 12 minutos de cohabitación con los sonidos de Mogwai, templados, emocionales, resistentes a la apatía y a la conformidad, puro disparo o "I think i blew it" con su tristeza a pruebas de días cálidos. 

"Your lights are (out or) burning badly" es otra proeza sónica que va creciendo cada segundo que pasa, desde una calma frenética a una furia desbocada cercana a Explosions in the Sky. Para terminar, "I think i blew it (again)" pone la guinda a un viaje alucinante por sonoridades de esas que emocionan. 



domingo, 5 de mayo de 2024

IDAHO. "Hearts of palm" (2000)

 


Sonidos calmosos los que producen Idaho, banda de California liderada por Jeff Martin, afiliados al slowcore desde sus inicios, y que tienen a este "Hearts of Palm", como uno de sus discos más brillantes. El inicio con "To be the one", ya pone las cosas  en el camino de la seducción íntima. 

Vale, no son American Music Club ni Red House Painters, (los dos grupos más afines estilísticamente hablando), pero la garra suave de canciones como la que titula el disco, bien sirve para posicionar su actitud.

Y es que el binomio formado por Jeff Martin y John K Berry, te hacía sumergir en la candidez de un buen trago de silencio ("Down in waves"),  aunque también hay pestañeos de distorsión como "Happy times" y "This cloud we're on".

Pero lo que predomina son las sombras tristes como "Dum Dum", o las cadencias donde el drama se vislumbra de hurtadillas ("Evolution is cold"). "Alte dena" parece nacer de una sombra que se hace luz, repleta de íntimos motivos para encadenarte a esa sensación  placentera donde es fácil caer en una necesaria apatía. Brillante.

En resumen, un disco repleto de sabiduría íntima, para gozarlo en días fríos de otoño, arropados por el calor de algún recuerdo.


jueves, 2 de mayo de 2024

LISABÖ. "Lorategui izoztuan hezur huts bilakatu arte" (2023)

 


Ni más ni menos que 25 años llevan Lisabö nadando entre el ruido y la furia, con espacios de parón para reponerse de tanto enjambre sónico, de esa batidora de post hardcore que no deja a nadie indemne, porque la música de este grupo va directamente al alma, te perfora, te deja ko. 

"Lorategui izoztuan hezur huts bilakatu arte", es la segunda parte de su anterior "Eta edertasunaren lorratzetan bilutzu ginen" (2018), forjando en la unión de ambos discos una frase que sobrecoge: "Y tras el rastro de la belleza, nos desnudamos hasta transformarnos en mero hueso en el jardín helado". 

Desde que suenan las introducción del álbum con "Sarraila", pasando por ese escalofrío que la sigue, "Urpekaritza baso kiskalian", la tensión que crean, como una amenaza constante, no deja de retumbar en tus oídos como una pulsión que todo lo devora. 

Las dos baterías, las guitarras, la tormenta desatada, el aire vencido por la inclemencia, el fragor de una demolición programada que amenaza llegar antes de los previsto. Así es el enfrentamiento con la música de Lisabö. "Kristalezko begiei so" te seduce por su voracidad y "Gauak gure ametsak baino luzeagoak dira" es un remanso de calma que te prepara para la mayor explosión del disco, "Gutariko bakoitza gara denok", donde con sus constantes cambios de ritmos crean un frenesí sónico de esos que quitan el hipo. 

"Hosto zehargarriak" es otro mazacote de post hardcore altamente emocional, inflamable, retador, que da pie a terminar el disco con la solvente y tremenda "Zeru arrosaren guraizeak", donde dejan a las claras el poderío inflamable que tienen. 

Contando los días que ando para verlos en directo por primera vez en unas semanas. A este gran grupo no hay que perdérselo.