Después del interesante debut que fue "Jealousy and diamond" en 2004, el trío formado por Dean Roberts, Martin Brandlmayr, y Werner Dafeldecker, siguió por la misma línea de post rock inspirado en trenzar corrientes de silencio e improvisación.
Canciones que se desmelenan en la servidumbre de monólogos interiores donde el trío afina sus instrumentos para acercarse a veces al slowcore, como en la imponente canción que titula el disco, o como la inicial "Rahana's theme", versículos de palmas y oraciones de siseos que confieren al grupo ese aire espiritual de noche perpetua.
Aquí los temas te sacuden desde el principio, son urdidos con parsimonia entre oleadas de cierzo a mansalva, lentitud fabricada para que aparezca a veces la voz de Chris Abrahams de The Necks para poner al experimento fluidez interna ("Liquid and strarch").
"Gin over soul milk" gravita en las mismas notas de desolación, mustia expresión donde los instrumentos se prestan a una calcinación de voces impresas. "Bird in the curtain" es otro de los puntos fuertes de "Uneay flowers", muy cercano a Talk Talk, y "Richest woman in the world", continua con la agitación glacial de una andanada de ondas sonoras con piano, solemnidad y alevosía.
"Uneasy flowers" fue lo último que hemos sabido de esta interesante banda, pétalos airados de suspiros bien trenzados, laceraciones de aire, pulgatorio de sombras. Después de comer, te los pones, te dejas llevar, y de golpe un exceso de calma. Silencio, se rueda.....