jueves, 29 de enero de 2015

THE DRUMS. "Encyclopedia" (2014)


Mi primer encontronazo con The Drums, no ha podido ser mejor. Un grupo que elige como single la radiante bizarria post punk que es "Magic Mountain" se merece todo mis respetos, en estos tiempos de memeces al por mayor, de copias y más copias que no dicen nada.

El duo formado por Johnny Pierce y Jacob Graham y tras tres años de estar en dique seco, se las han ingeniado en este "Encyclopedia" para sacar una colección de canciones que te hace festejar con nostalgia los años de The Smiths, Echo and the Bunnymen y demás tahures de la inconcreción.

The Drums a veces parecen una versión iconoclasta de Animal Collective ("I can't prend"), pero lo suyo es utilizar los instrumentos para rememorar que en los 80 , 90, del riesgo nacieron multitud de propuestas madres que han forjado la dirección posterior de la música independiente.

Reconozco que me lo he pasado pipa con ellos. "I hope time doesn't change him" es una pasada, lenta, gratificante, como para aparecer en la siguiente pelicula de Sofia Coppola. Bálsamo para el dolor, aspirina para  una dieta de sensaciones cariñosas. También tienen tiempo para ponerse saltarines y juguetones, lúcidos en slogans de usar y tirar ("Kiss me again") o para revolotear como un enjambre de luces despiadadas en noches sin fin ("Let me").

No suenan empalagosos cuando radian verdades lentas como "Break my heart", apoyados en el fantasma de Morrisey. Post punk militante que en "Face of god" se deja llevar por punteos peligrosos, por fuegos en la sombra entre estribillos luminosos.

"Bell laboratories" es la más oscura del lote. Juguetona, carta marcada que da paso a un guiño a Jesus and the Mary Chain, "There is nothing left",  épica y cariñosa a la vez. The Drums, un buen grupo para buen recordar viejos tiempos.


martes, 27 de enero de 2015

LUKE HAINES. "Rock and rolk animals" (2013)


Animales roqueros. Hay están en la portada: Nick Lowe, el tejón, Jimmie Pursey (Sham 69), el zorro, y Gene Vincent, el gato. Luke Haines, el enfant terrible del pop ingles, añorado por sus Auteurs, fabricó una enorme colección de canciones con formato de disco infantil.

Desde que suena "Magic town" con su glamour pop, te ves contaminado por los arrecifes de candor, lujo y insolencia, dorados lagos con motores iconoclastas. La que titula el disco es todo un himno para unirnos con los animales en una danza para surcar lagos de azucar.

Haines siempre a su bola. Contemplando el paso del tiempo, los ismos que vienen y se van, las alfombras rojas de la decadencia del pop. "A badger called Nick Lowe" es dandismo y suspiros que no se acaban y "Three fendz" es  una ensalada de folk con flauta incluida. Soberbio.

"The birds....the birds", es casi medieval, narraciones comedidas, películas para sortear desgracias, la voz de Haines siempre como un motor que no para de pedalear cordura. Si, definitivamente, lo de Luke es de nota. Se sobra el sólo para participar en una bacanal de fuegos artificiales donde la decadencia deja paso a la gozosa inmoralidad.

Animales hablando de sus cosas, bebiendo soda con whisky, explorando el lado oculto del monte, o cantando a la luz de la luna. Todo vale. "The angel of the north" es otra elegante proclama repleta de bisoñez, y para acabar la media hora de luces feroces, "Rock and roll animals in space" punto y final por un recorrido de sueños y buenos sucesos. Luke, el ariete del pop anglosajón.


lunes, 26 de enero de 2015

THE BAD PLUS. "Prog" (2007)



Iverson, Anderson y King. Cada disco que escucho de este trio de jazz a su manera, me tienen más en sus manos. Jazz que reconstruye canciones de hits, jazz que ejecuta composiciones propias desde una vertiente que auna lo free con gotas de limón y romanticismo.

En este quinto album se atrevieron para empezar con una versión de Tears for fears, "Everybody wants to rule the world", alquimia que empieza suave, con el teclado sedándote, para danzar con frenesi en sus cinco minutos largos. Pura dinamita.

Si ya pasaron por su batidora Radiohead o Pixies, ¿por qué no intentarlo también con Bowie?. "Life on mars" es una catapulta de efectividad, una inclemente y poseida versión del camaleón que ralla la maravilla, climax que cautiva, teclas himnos, beber hasta perder el control de los sentidos, bailando a la luz de una radiante luz sin fin.

"Prog". Si, lo de The Bad Plus siempre ha sido muy Prog. Aunando iconoclastia a raudales, jazz, rock, música que si no existiera habría que inventar. Las canciones propias de la banda, como "Mint", son igual que impactantes que los covers. Compuertas abiertas donde entra aire que oxigena los ambientes, que pulsan sensaciones, que se bifurcan por cientos caminos que recorrer.

"Thrifstore jewelry" es otra muestra de este encantamiento que nos salpica con hondura. El esquizo piano de "Tom Swayer" abre puertas de oxigeno, limpios sonidos que reparten octavillas a favor de la supremacia de las notas musicales sin corsé.

"1980 world champion" es otra muestra de la salud de una banda que populariza (a su manera) el jazz para que los que aun no lo han hecho, abran puertas. Muchas puertas.


miércoles, 21 de enero de 2015

LIARS. "Live at the music hall of Williamsburg" (2010)


Cartuchos de dinamita. Asi para empezar es lo que nos encontramos cuando damos al play y suena "I can still see and outside world". Liars, pilotados por Angus Andrew, una de las bandas que más ha hecho por hacer del rock algo peligroso, lanzaron este live para que sepamos que los chicos también saben liarla en directo.

Los neoyorkinos saben jugar sus bazas. "Clear island" es punk consesuada con un megatrón de rabia. Rabia que se convierte en "A visit from drum" es una elaborada y meticulosa procreación de los ambientes malsanos de Gallon Drunk, siempre a la manera de estos salvajes.

En este disco,están todos los temas de su carnoso "Sisteworld" y algunos de sus anteriores trabajo. Suena "We fenced other gardens with the bones of our own" y te dan ganas de macharcar conciencias, de merendar tecnologia untada en radiaciones sónicas despistadas. Me quedé prendados de ellos con sus primeros discos, luego su evolución posterior me impacto algo menos.

Este "Live" viene a poner las cosas en su sitio. "Scissor" y su teclado de ultratumba,  balada para barriovajeros. Pero la cosa cuando más caliente, mejor se pone. "The overachievers" es una locomotora, es un sindios, un cargamento de electricdad, himno desde el esputo, cardiografía del punk de ahora militante en la diaspora de la palalabra, en la geografía del ruido.

Liars, estos mentirosos se lian la manta a la cabeza para hacernos creer en la no fe. "Scarecrows on a killer slant", vale para bailar con esqueletos y "Sailing to Byzantium" es un ralladura oriental que te dejará sin palabras.

Joder, como suenan cuando aprientan el acelerador en "Freak out", puro desparrame sideral. Liars, directos, a por todas, frenesí salvaje, punzadas en el corazón, bailes de dulce infierno.


lunes, 19 de enero de 2015

LE BUTCHERETTES. "Cry is for the flies" (2014)


Omar Rodriguez (The Mars Volta) no es tonto. Cuando se fijó en este combo que viene de México, supo que estas chicas tenían algo que decir. Teresa Suarez y Lia Barnwell se las apañan para hacer del garaje y de punk un binomio donde todo es posible.

Desde guiños a Boss Hog, "Burn the scab", hasta ladrillazos en las cabeza como "Demon stuck in your eye", donde se las apañan para recoger y amontonar cantidades se recursos eléctricos para irradiar una elevada y detonadora explosión siempre con matices.

"Your weakness gives me life" es una tormenta, un vendaval de brio y luciérnagas perdidas en una noche sin fondo. En "Moment of guilt/the gold chair ate the fireman", se hacen acompañar por Henry Rollins. Más leña al fuego.

Le Butcherettes no son para nada lineales. Lo suyo es ir sorpresa tras sorpresa. "Boulder love oye layers of rock" y su órgano sesentero y oscuro da paso a "Shame, you're all i've got left", más traquila, un torbellino de codeína, un acicate para soñar.

La estocada casi Sonic Youth, viene con "Normal, you were", puro riots girs cabreado y lleno de luces que se deforman. Las chicas, a lo suyo, a darnos pávulo, a cantar casi como deudoras del espiritu de Nina Hagen, "Poet from Nowhere".

Para terminar, otra tenebrosidad, "Crying out to the flies", una buena manera de poner el epilogo a un monumental y absorvente disco. Desde México con amor.


sábado, 17 de enero de 2015

XIU XIU. "Women as lovers" (2008)


Aunque a muchos les irriten, yo les adoro. Adoro la esquizofrenia de su propuesta. La voz de Jamie Stewart a más de uno  le saca de sus casillas. A mi, me tranquiliza. Empezar el disco con una pasada casi loung  como "I do what i want, whn i want" es una forma de intentar acercar su propuesta radical a los que aun no han disfrutado de este bendito caos.

Si, bueno, este "Women as lovers", poco tiene que ver con esa taladradora que fue "Knife play" (2002), pero sigue intacta su versión perversa de The Smith. "In lust you can hear the axe fall" es un torbellino de ruidos, de instrumentos que aparecen y se van, de luces que pernoctan en un grito, de delirios de grandeza, de pechos desbocados de soledad.....

Más también hay tiempo para la ternura. Muy a la manera de Jamie. "F.T.W." es delicada, un trapo mojado sobre la frente de fiebre, una cancoón de cuna para astillar tu amor. A muchos le pone nervioso. A mi me parecen una de las creaciones post-punk más originales que ha salido en los últimos años ("No friend oh!").

Pudiera ser "Women as lovers" el disco para recomendar a los que aun no han caído en sus redes. Y eso que tienen también cabida rugosidades como "Guantanamo canto".  Y cuando suena la versión de Bowie, "Under pressure" con Michel Gira de Swans, haciendo de Freddie Mercury, ya esta todo dicho. Joder, que puta y divina locura....

Y todo lo que viene después es de igual calidad. "Black keyboard" es un tentempie para sonarte la nariz de rocío de lujuria y cuando te pones "You are pregnant you, you are dead, sólo queda refugiarte en tu cueva secreta para no verte salpicado por este semen sónico que esparcen Xiu Xiu.

Música para avanzar, para no quedarse impávido, para revolverte el alma, para grifarte con andanadas de ruidos de catarsis ("The leash"). Los silbidos de "Child at arms" te hacen pasar un mal rato de cojones. "Puff and Bunny", maracas incluidas, viene para que no te pierdas en vahos desagradecidos.

Xiu Xiu, un canto loco, el vals desquiciado, la controversia del autismo, o como la música puede avanzar por senderos repletos de pastillas con efectos siempre secundarios.


jueves, 15 de enero de 2015

LAETITIA VELMA. "Les eaux profondes" (2011)


En espera del nuevo disco de Dominique A, "Eléor", que saldrá a la venta el próximo mes de marzo, es buen momento para pararse en este disco de esta chanteuse gala, apoyada por el propio Dominique A, el cual está detrás de algunas composiciones de este interesante disco.

Laetitia colaboró en el disco del de Nantes, "L'horizon", y ahora el maestro le devuelve la pelota ejerciendo de padrino. Y bien que se nota. La canción que titula el disco, es puro Dominique A. Dramatismo, guitarras a punto de estallar que se quedan al ralentí, luces y sombras en un jardín de frutos prohibidos.

La joven Laetitia (21 años cuando sacó el disco), sacó un primer largo, profundo, lleno de matices, con el piano de aquí para allá ("Le pays etranger") confabulado con su voz, narrando historias en medio de un ambiente de tristeza, melancolía de lluvia siempre tapiz de caminos y desgarros ("Au-delâ").

A veces la guitarra acústica se acompaña de tambores de guerra, "Retournez-vouz", otra se acompaña de una patina leve de electrónica, "Mon coeur" para soltar sus palabras al viento. Si, Dominique no se equivocó. "Avant que tout s'effondre" empieza tranquila para convertirse en un torbellino de guitarras que mecen ataques de chanson rebelde.

También hay tiempo para los cuentos de hada, para la tranquilidad de "Le chemin" o para retazos de luz acogedora para tiempos de dolor, "Le supplice de l'eté". "Les cheveaux et les larmes", me tiene hechizado. Teclas en invierno, y calor en el ambiente.

Mientras cuento los días para la aparición de "Eléor", aquí me detengo en esta crisálida envolvente. Y aprovechando que estamos en Francia, JE SUIS CHARLIE. Contra los disparos a las palabras, contra los fanáticos, contra los que quieren poner un cepo a la voz.


lunes, 12 de enero de 2015

PERRO. "Tiene bacalao, tiene melodía" (2014)


Vaya puntazo el disco de los murcianos Perro. Ya habían apuntados maneras con sus maquetas y epes anteriores. Este disco es la culminación de un inicio que fue prometedor, y con este petardazo llamado "Tiene bacalao, tiene melodía",les pone en un lugar alto dentro del panorama indepentiente de aki.

"Gran ejemplo de juventud", en el inicio, es un disparo que nos recuerda a los primeros Surfin Bichos. Perro tiene arte, armas para desde el gamberrismo más amateur producir himnos tan desbordadores como "¡Viva el porras!" o garagismos cromagnon de lo más espabilado ("Calculadora troglodita").

Perro. Un buen nombre para ladrar y ladrar al compás de sinfonías tan bestiales como "Paco fiestas" y sus teclados de kraut de golosina, en medio de un aderezo vocal e instrumental de lo más logrado. "Chino tío" es emocional, intuitiva, como una botella rota que te espera en el suelo cuando acabas de ducharte.

Mi preferida, "La Reina de Inglaterra", con estribillos tan espeluznantes ("mi abuela es la reina de Inglaterra", coreada por mi hijo como unna canción de "Hora de aventuras") y unas guitarras que salvando las distancias me traen a la memoria a los Wedding Present. Rock afilado, melodías para titiritar, sorbos y más sorbos de noise acogedor. "Marlotina" es otra vuelta de tuerca a la mecánica alemana; minimal, soberbia, hacha y despídete de sueños.

De nuevo la sonrisa. "Larry, no come", Punk de gafa pastas, trópico en una barra de mar muerto. "Catán" es otra muestra más de la solvencia de Perro, de las punzadas que recrean siempre con borbotones de humo y luces.

"El ecco y el equiseto" ponen el punto final a un viaje que se prolonga por los arcenes de la independencia más total. Perro, canes desbocados, fieras sin domar.


viernes, 9 de enero de 2015

THRUSTON MOORE "The best day" (2014)


Vuelve Discos Pensados tras el parón navideño. Vuelve tras unas semanas de descanso, de viajes marinos, de excesos controlados, de neones apagados por la voluntad del tiempo de seguir su curso sin mirar atrás. 2015, año de cambios, lo presiento.....

De momento, y como regalo de reyes, aquí va un discazo. El ex-Sonic Youth, Thurston Moore, sacó en el año difunto este "The best day", para los que tenemos morriña de los jóvenes sónicos pongamos flores disecadas en nuestros oídos, caos y lírica. "Speak to the wild", el comienzo, es todo un ejemplo. Podría estar en cualquier disco de los Youth.

"The best day". La señora de la portada, su madre, parece observar junto al perro, las andanzas del larguirucho componente de una de las bandas más importantes del siglo pasado. Moore, acompañado de Shelley,  James Sedwards y Deb Googe de My Bloody Valentine. nos deja sin aliento cuando suena "Forevermore", intrigante, con suspiros eléctricos, guitarras que se expanden mientras la rueda de la vida gira y gira. La portada en blanco y negro. La música, un enorme tornasol.

"Tape", es el experimento del disco. Fantasmas e imprudencia, acústica con grisú, que da el paso a la que titula el cd, la mejor del lote, con los punteos de Moore manejando a su antojo los tiempos, con la voz haciéndonos jóvenes, como cuando "Goo" hacia estallar las paredes de nuestro juventud.

Sí. decididamente, hemos empezado bien el 2015. Menuda dádiva para las querencias particulares de nuevas golosinas para llevarse a la boca. En "Vocabularies", Thurston se recrea de nuevo en ambientes acústicos, casi psicodélicos, roña de juguete, reflexión desde una catarsis confeccionada con arquitectura textil del ruido.

El instrumental "Grace Lake" y el fin de de fiesta de "Germs Burns" vienen a decirnos que sí, que Moore nunca se ha ido, que el espirituo de los Sonic Youth prevalece en él, que no hace falta convertirse en duendes (Pixies) vendidos al por mayor, para seguir en la brecha. Moore, la honestidad de un músico que sigue dando la talla.