Con que fuerza abre Paul Weller el que fue su disco 24 en solitario. "White sky", muestra a las claras las rugosidades del viejos mod que se resiste a apalancarse, a soltar lastre y a disfrutar sin aspavientos de una recuperación de sonidos de toda la vida.
"Saturns pattern" continua el camino que abrió "Sonic kicks" (2012), y en temas como el que titula el album, roqueando sin pasarse, se le ve más suelto que una liebre. En "Going my way", con piano incluido, confecciona una fabula de pop entre nebulosas de dulce psicodelia.
El disco es puro disfrute, es alegría y también mucha electricidad. Como en la galvánica y potente "Long time" que me hace recordar la chulería del maestro Iggy Pop. El soul también tiene su sitio en "Saturns Pattern": "Pick it up" es negra y sudorosa, rítmica y total.
Y como no tocar la electrónica desde la atalaya del jefe mod con "I'm where i should be", un pequeño himno repleto de melodías cándidas y positivas. Soul pop con burbujas y trajes de baño te encuentras en "Phoenix", con coros de otra época, con pianos de cola vermut.
Para terminar, "In the car...." con aliento blues y la más larga del album "These city streets", lounge music para tiempos calurosos. Buen disco pues este "Saturns pattern", de disfrute inmediato y con sufiente energía como para no cansarse de él.