La cantante inglesa Emma Louise Nibblet (Scoutt Niblett), recurrió al gran Steve Albini como productor del que fuera su segundo disco. Y claro, si Albini está por medio tenemos claro que la calidad del sonido es superlativa, aunque escuchando la inicial "Miss in love with her own fate" nos estamos enfrentando a una sacudida de lofi destartalado.
Es con "No-one's wrong (Giricola)", cuando la cosa se pone seria, con una tensión que notas que va subiendo poco a poco. y que en "Until death" se convierte en un entramado sónico de distorsión siempre reforzada por la voz de Scoutt. "Fire files" nos recuerda a Pj Harvey para en "I'll be a prince (shhh)" someternos a un drama sónico de lentitud envolvente.
"Boy" y su minuto y medio da paso a "Drummer boy" una de las piezas más logradas de un trabajo que marca sin duda un momento especial en la carrera de una artista que quizás se hubiera merecido algo más de suerte.
Donde se nota más el toque de Albini es en "12 miles" y en la lenta pero espectral "It's all for you", caricias envenenadas para una tarde de nostalgias necesarias. El camino de Scoutt Niblett terminó en 2013 con "It's up to Emma". Queda una buena colección de postales sonoras que cosas que decir.
Con este artículo despedimos 2022. Os deseo a todos un buen año nuevo, mucha felicidad y salud, mucha música y buen juicio. Vamos a por el año 13 de Discos Pensados. Buen número que seguro traerá música tan interesante como en este año ya finado.