lunes, 24 de junio de 2024

LÔBISON. "De lo que no se habla no se olvida" (2024)

 


Qué ganas que tenía de hincar los oídos al último trabajo de Lôbison. El proyecto de Juamba d'Estroso da otro paso más en ese camino suyo, en esa senda ya trazada donde la inconformidad se da la mano con las buenas maneras, con una forma de hacer música que se destila poco por aquí. 

Ya se quedan corto los paralelismo que podríamos hacer con Nick Cave. Juamba es una especie de Scott Miller estepario, con esa voz que parece nacer de un geiser de dragones, con esa forma tan particular de llevarnos hacia paraísos siempre perdidos, con el éter sobrevolando nuestros sueños profundos. 

"De lo que se no habla no se olvida" tiene trallazos que son rugidos casi punks, como "Normalizando la honestidad",  versos fundidos en negros que parecen sacar de nosotros lejanos recuerdos de juventud pasadas por el barniz de la derrota ("Imposible soy"). 

Bien pudiera ser este su disco más peligroso, más en el filo de motín anímico. Las letras siempre punzantes, te desbordan como  en "Antagonistas",  donde Juamba aparece como ese cantautor de absentas necesarias para seguir viviendo, para seguir buscando en las nubes algún lienzo prohibido para crear esperanzas. 

"Difícilmente yo" es una de las canciones más hermosas que ha grabando en su carrera. Lírica hasta la extenuación, boga entre susurros, cava en tu ser antiguas fotografías olvidadas, te mecen las teclas y te confundes en vaho con la entrañable bohemia que destila cada nota. Hermosa y llena de catarsis fugaces. 

"No me quiero morir"  es un himno, una declaración de intenciones, la forma perfecta para hacer un videoclip y ponértelo en bucle cuando haga falta un buen chute de energía para el alma. "Entrampada" roza el post punk con sus oscuridades desaforadas, entre palmas y palmas que anunciar insumisión,  y "Milagrera", que decir de "Milagrera", como si  The Birthday Party se hubieran extraviado de un viaje en el tiempo y hubieran vuelto para provocarnos escarnio: "Camarero un botella de licor de sedición para todos!!!!!". 

Para terminar "De lo que no se habla no se olvida", "Show show fantasma", la primera piedra de toque que oí de este festival de sensaciones al límite que es Lôbison. Seguro que cuando el año llegue a su ocaso, este quinto trabajo de Lôbison estará en lo alto, en lo muy alto. El arte en estado puro, la delicadeza de un músico en continuo estado de gracia. 


4 comentarios:

Juanjo Mestre dijo...

Qué maravilla, le dediqué unas líneas en el Exile hace unos 15 días. Abrazos.

Carlos dijo...

Ya lo lei Juanjo. Que gran grupo y que pedazo de artista. Saludos!!!!

Javier Leal dijo...

este va a a mejor cada año, como los buenos vinos. gran disco, y gracias por el blog, lo sigo desde hace muchos años

Carlos dijo...

Hola Javier. Muchas gracias por seguir el Blog. En cuanto a Lobison, lo dicho. Me faltan palabras para definir a este gran zapador de emociones. Saludos!!!!!