Nada nuevo bajo el sol con el reciente trabajo de Bar Italia que ante no hallamos disfrutado en sus anteriores discos. ¿Es eso malo? Si algo funciona, y se consiguen buenas canciones hay que ser seguir por esa senda. Con la brillantez como abren este "Some like it hot", con "Fundraiser", single automático.Nina Cristante y su colegas nos siguen llamando a fiestas del club como vemos en "Marble arch", melosos, como si los Sonic Youth se hubieran vuelto indie pop, o "Bad reputation" y ese aire canalla y decadente que lo envuelve todo y te hace sonreír.
De momento la fórmula va bien. Hasta cuando miran a los 90 en "Cowbella" donde ahora si recurren a la distorsión para ser una especie de Gargabe traviesos. Son divertidos, amenos, desarrapados, conscientes de que viven a lomos de calles repletas de suspiros y algún susto ("I make my own dus").
"Plastered" es sensual y en "Rooster" con ese inicio de guitarra desenfocada, parecen seguir los pasos de PJ Harvey. Luego en "The lady vanishes" parece que estuviéramos con una sombra de Portishead. Y es que así son Bar Italia. Un grupo con muchas referencias, una amalgama de sonidos que entran a la primera, un grupo que sigue regalándonos buenas canciones. Que no paren en su empeño.





