sábado, 20 de febrero de 2016

PETER GABRIEL. "III" (1980)


Dentro de la amplia discografía en cuento a número y registro de la carrera del ex-Genesis, su primera étapa es mi preferida. Sus cuatro primeros discos ("I","II","III" y "IV") que van desde los años 1977 a 1982, fueron todo un arriesgado tour de force de un artista que finalizado el proyecto de la banda madre, se vio con la necesidad de seguir investigando en los márgenes.

Este "III", es mi favorito. Por todo, por su oscuridad por el acompamiento (Tony Levin, Robert Fripp, Kate Bush entre otros), y ya desde las iniciales "Intruder" y "No self-control", vemos a Gabriel saliendo de la capsula del rock sinfónico hacia territorios obsesivos, repletos de islotes donde también aparecen aguas pop.

"Stars", con el bajo del crimsoniano Tony Levin, es una especie de hit de medianoche. Lacerante y con la gravedad vocal de Gabriel repartiendo salmos desde el desconsuelo. La portada lo dice todo. Parece que estamos enfrente del cuadro que aparece en "El retrato de Dorian Gray". Descomposición por juventud, rasguños en el alma por la efímera voluntad de los años tiernos... El piano emociona en la barroca "Family snapshot", quizás un guiño a los futuros éxitos que vendrían después.

Y "And throught the wire" también participa de esa emotividad, de ese cargamento de razones que tiene su punto álgido en "Games without frontiers", con Kate Bush de sirena varada en la costa de este hombre orquesta de muchas músicas posibles.

Experimentos como "Not one of us", (cercana al rey carmesí, y sobre todo la recordada por su importante histórica, "Biko", donde pone el acento en los derechos humanos en Sudáfrica intuyendo a quien se iba a erigir en uno de los máximos exponentes para el conocimiento de las músicas del mundo) ponen la guinda a un pastel que seguro te saciará.

El "III" fue un bueno número, el mejor de su carrera, la mejor forma de recuperar viejos discos de esos que debemos desengrasar, quitarles el ambiente opresivo del polvo lacerante.




No hay comentarios: