LA ESTRELLA DE DAVID. "Maracaibo" (2011)

Fue el visionado del clip "Un último esfuerzo", lo que hizo que me lanzará como un poseso a la adquisición de este segundo lp de La Estrella de David, liderados por David Rodriguez, el que tan buenos ratos nos hizo pasar con Bach is Dead  y sobre todo con los indispensables Beef, uno de los grupos indies más a su bola que ha dado el panorama ibérico.

"Maracaibo" es una gozada de principio al fin, la obra de un anticantautor que nos desborda por todos los lados con sus extrañas letras, con su voz tan sin voz. ¿Y que me decis de esta portada de parvulario surrealista? Está bien que halla dejado su trabajo de productor con su compañera La Bien Querida (algún dia alguien me explicará porque los medios indies la han dado tanta vidilla a una artista que en mi modesta opinión repite sonidos de otros, sin ofrecer nada de interés) para hacer desfilar ante nosotros su peculiar concepto de canción.

"Escalofrio" es puro indie declamatorio de cuentos sin final que da paso a "La carretera", una adaptación de un tema que cantó Julio Iglesias (?), misteriosa, extraña, beduina de amor, caliente y formol emocional. "Anita" me encanta por su lado naif, infantil, aurea de gominolas en un espectro musical de lo más impactante.

En "El más romano del mundo", se la va algo la mano sonando demasiado a Nacho Vegas, pero no pasa nada David. "Más mañanas", es extravagente, folk sideral con liturgia de nubes de sueños. Y el rock serio y rugoso de "La gran fiesta de la democracia Parte 2), me parece una apuesta segura para este cd abierto a todo tipo de comensales.

El tratamiento del  amor que nos ofrece en  "Cuando te deje" es creible, como ramos de uvas encapsulados en un motín de palabras de cariño. Si, esta estrella que el amigo David ha forjado en su cielo particular es una luz que apabulla y encanta. Y es que esa rumba guasona de "Decathlon", es como encontrarse a La Dama se Esconde poseidos por unas palmas de gracia.

Y no perderos el video que engancho por aquí de "Un último esfuerzo", pista para quien aun no conozca a David el estrellado. Yo, tengo ya un telescopio que desde mi tercer piso, observa las andanzas de estos versos locos discolados por este personaje tan peculiar y necesario en nuestra escena tan floja y manida.